Acabó el juego | Samuel Bossini

Murió el trapecista...

Acabó el juego. El vagabundo olor de los cráneos enamorados. Acabó el ofrendar de lo

que no existe. Fin al Amor semejante a vasos de Agua por lo inocuo y voluble. Muchos

han muerto ya. Muerto amigos y amores. Ha muerto la flor que trepaba las paredes para

lograr algo de vértigo. Murió la fábula del loco enamorado bajo un ceibo. Todo es azar

en las manos de los muertos. El diablo siempre tiene la mejor excusa. Murió la atención

de los abandonados. Murió el trapecista. Murió Dios que bajó, miró, se amargó y se fue.

 

La esperanza suele instalar millones de falsas, ante los ojos de un recién nacido.

 

Samuel Bossini

(De 'Mundo Natural')

Añadir nuevo comentario