No bebía
tenía el renunciamiento de un pez en el Sahara
de una vaca castrada por los banderilleros de la feria.
Comunista, pudo haber sido masón o cuáquero.
Igual le habrían cortado los nudillos,
igual habría partido su tazón con nadie.
En deplorables noches montaba a mi madre
como quien coge un tren equivocadamente.
Ah la pradera donde fue comido por los buitres
(sus hijos).
Ah este sol implacable sobre mis ojos.
Damaris Calderón
(Matanzas, Cuba, 1967)
(De 'El pasado del cielo: La nueva y novísima poesía cubana' - Antología por Víctor Rodríguez Núñez - Medellín, Colombia, Alejandría Editores, 1994)
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